Si una de las fomras que adopta la ansiedad algorítmica consite en creer que las recomendaciones del algoritmo nos malinterpretan, otra es sentirse rehén de ellas, tener la sensación de que uno no podría escapar aunque quisiera. Hoy en día, quizá demasiadas cosas dependan de esto flujos, y su influencia es demasiado ubicua. Hasta ahora, su regulación ha sido bastante ineficaz y la experiencia es tan apasionante y cómoda que a la mayoría de los usuarios de internet les resulta difícil prescindir de ella. Las recomendaciones algorítmicas son adictivas porque confirman sutilmente tus sesgos culturales, políticos y sociales, deformando tu entorno hasta convertirlo en una imagen especular de ti, al tiempo que hacen lo mismo para todos los demás.